Una tarea no tan complicada.
Pablo Martín el chef de Alimentación consciente, en esta ocasión nos brinda consejos para prevenir el resfrío a través de nuestra alimentación
Mas vale prevenir que curar
Continuamos en el camino de la alimentación sana y consciente. El otoño es la estación adecuada para tomar las iniciativas necesarias para prevenir las gripes y resfriados, que comenzarán a afectarnos con más frecuencia a medida que se acerque el invierno; la aplicación del viejo refrán “más vale prevenir que curar” es más oportuna que nunca en esta época y de cara a fortalecer nuestras defensas.
En mi tercer libro (Medicalimentos y vitanutrientes, editorial tetraedro) junto a Pablo de la Iglesia, naturópata, damos varios consejos para prevenir diferentes enfermedades porque cada vez son más las personas preocupadas por el abuso de antibióticos y antigripales. Para que pasemos un invierno con un mínimo posible de medicación, sugerimos recurrir a algunas estrategias simples basadas en elementos caseros y naturales:
Como primera medida, es fundamental aumentar el consumo de frutas y verduras; estos alimentos nos aportan nutrientes antioxidantes que posibilitan una buena respuesta de nuestro sistema inmunológico. Los más usados a estos fines son: el ajo, cebolla, perejil, frutos del bosque, mangos e higos.
También contamos con el limón, que, junto con la miel y las hierbas específicas, constituye la trilogía presente en todas las épocas y tradiciones para hacer frente a estos “bichitos” que tantas molestias nos provocan; además del limón, debemos destacar otros cítricos, como la naranja o el pomelo, cuyo aporte diario de vitamina C y bioflavonoides ayudará a que nuestro “ejército interior” pueda mantener la paz en nuestro cuerpo.
Las hierbas medicinales son otra herramienta que no debe quedar olvidada, recuperada únicamente cuando visitamos a la abuela; de hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda su uso, puesto que su acción suave tiene un margen de seguridad muy amplio.
Aunque se debe desconfiar de las afirmaciones milagrosas que se hacen al respecto, con la actitud adecuada y consumida con responsabilidad, hay hierbas que son potentes agentes terapéuticos y preventivos de todo tipo de infecciones; podemos mencionar el eucalipto, la equinácea, el llantén, el té verde, entre otras.
Una mención especial hacemos en el libro para uno de nuestros preferidos “todo terreno”: el jengibre. Fresco o seco, rallado o en polvo, el jengibre es un gran aliado para prevenir afecciones respiratorias y acelerar su curación.
Una forma muy práctica de utilizarlo es cortar finas rodajas y mantenerlas en la boca como si fueran pastillitas; esto tendrá a raya a los “bichitos” que han invadido nuestras vías respiratorias. Puede hacerse uso de este recurso varias veces al día.
Acerca Pablo Martín: Pablo es periodista y chef especializado en alimentación consciente, si queres saber más sobre el y sus temas de alimentación consciente ingresa a sus redes @pablomartinchef o a su web www.pablomartinchef.com